viernes, 30 de noviembre de 2012
jueves, 29 de noviembre de 2012
martes, 27 de noviembre de 2012
Canción de otoño en primavera
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
Plural ha sido la celeste
historia de mi corazón.
Era una dulce niña, en este
mundo de duelo y de aflicción.
Miraba como el alba pura;
sonreía como una flor.
Era su cabellera obscura
hecha de noche y de dolor.
Yo era tímido como un niño.
Ella, naturalmente, fue,
para mi amor hecho de armiño,
Herodías y Salomé...
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
Y más consoladora y más
halagadora y expresiva,
la otra fue más sensitiva
cual no pensé encontrar jamás.
Pues a su continua ternura
una pasión violenta unía.
En un peplo de gasa pura
una bacante se envolvía...
En sus brazos tomó mi ensueño
y lo arrulló como a un bebé...
Y te mató, triste y pequeño,
falto de luz, falto de fe...
Juventud, divino tesoro,
¡te fuiste para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
Otra juzgó que era mi boca
el estuche de su pasión;
y que me roería, loca,
con sus dientes el corazón.
Poniendo en un amor de exceso
la mira de su voluntad,
mientras eran abrazo y beso
síntesis de la eternidad;
y de nuestra carne ligera
imaginar siempre un Edén,
sin pensar que la Primavera
y la carne acaban también...
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer.
¡Y las demás! En tantos climas,
en tantas tierras siempre son,
si no pretextos de mis rimas
fantasmas de mi corazón.
En vano busqué a la princesa
que estaba triste de esperar.
La vida es dura. Amarga y pesa.
¡Ya no hay princesa que cantar!
Mas a pesar del tiempo terco,
mi sed de amor no tiene fin;
con el cabello gris, me acerco
a los rosales del jardín...
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
¡Mas es mía el Alba de oro!
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
Plural ha sido la celeste
historia de mi corazón.
Era una dulce niña, en este
mundo de duelo y de aflicción.
Miraba como el alba pura;
sonreía como una flor.
Era su cabellera obscura
hecha de noche y de dolor.
Yo era tímido como un niño.
Ella, naturalmente, fue,
para mi amor hecho de armiño,
Herodías y Salomé...
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
Y más consoladora y más
halagadora y expresiva,
la otra fue más sensitiva
cual no pensé encontrar jamás.
Pues a su continua ternura
una pasión violenta unía.
En un peplo de gasa pura
una bacante se envolvía...
En sus brazos tomó mi ensueño
y lo arrulló como a un bebé...
Y te mató, triste y pequeño,
falto de luz, falto de fe...
Juventud, divino tesoro,
¡te fuiste para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
Otra juzgó que era mi boca
el estuche de su pasión;
y que me roería, loca,
con sus dientes el corazón.
Poniendo en un amor de exceso
la mira de su voluntad,
mientras eran abrazo y beso
síntesis de la eternidad;
y de nuestra carne ligera
imaginar siempre un Edén,
sin pensar que la Primavera
y la carne acaban también...
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer.
¡Y las demás! En tantos climas,
en tantas tierras siempre son,
si no pretextos de mis rimas
fantasmas de mi corazón.
En vano busqué a la princesa
que estaba triste de esperar.
La vida es dura. Amarga y pesa.
¡Ya no hay princesa que cantar!
Mas a pesar del tiempo terco,
mi sed de amor no tiene fin;
con el cabello gris, me acerco
a los rosales del jardín...
Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
¡Mas es mía el Alba de oro!
viernes, 23 de noviembre de 2012
Deja vu
........
Era de noche ya cuando apareció todo esto. No lo creo aún, tal vez ocurrió o tal vez no, no lo sé.
Aún así me parece una ilusión, debe ser por algunas novelas o libros que he leído, puede ser, pero cada vez que esto vuelve a mis recuerdos duele el alma, duele el corazón, la cabeza y el amor.
Hoy me duele la cabeza pensando todo esto, no sé pero esto ya se ha extendido muchos días..la cefalea sigue, el humor sigue, los cansancios siguen... No quiero más de esto.
Apareciste en mi vida de esa manera, en un sueño, escapándote y escondiéndote entre mi almohada, entre mis sesos. Tu silueta es borrosa, obscura pero bella. Solo percibo el calor de tu presencia, el olor de tu corazón y la mirada de algo perdido. Vienen a mi mente esos recuerdos, esa despedida, ese adiós que se volvio eterno, que ya no escuche más tus palabras, esas dulces palabras.

No pude contenerme al saber dicha noticia, lloré demasiado y todavía lloro aún, nuestro corazón, nuestros sueños, nuestro futuro se fue al tacho. Una llamada me acogió un día, después de dos largos meses, sin saber de ti. Tu madre angustiada, ella acongojada me comunicó la desgracia.
¿Qué había pasado? No lo sé, aún yo no.. simplemente quise no creerlo, aún no lo creo pero..no te hubiera querido perder de esa manera, ¿un accidente?.. moriste.
Mi alma solloza y quiere rendirse en esta lucha, en la lucha de no querer creer. Te quiero. Te extraño.
Este recuerdo se aloja en mi mente, tu recuerdo, con una fusión de realidad, con la realidad pasada. Aún espero saber qué ocurrió, no quiero que sea un recuerdo, un sueño... Ilusión onírica o un deja vu
"Gotta change my answering machine
Now that I'm alone'
Cuz right now it says that we
Can't come to the phone
And I know it makes no sense'
Cuz you walked out the door
But it's the only way
I hear your voice anymore.
[...]
And I'm so sick of love songs
So tired of tears, so done with wishing You were still here [...]
Leave me alone
"Gotta change my answering machine
Now that I'm alone'
Cuz right now it says that we
Can't come to the phone
And I know it makes no sense'
Cuz you walked out the door
But it's the only way
I hear your voice anymore.
[...]
And I'm so sick of love songs
So tired of tears, so done with wishing You were still here [...]
Leave me alone
(Stupid love songs)
Don't make me think about her smile
Or having my first child
I'm letting go
Turning off the radio..."
So Sick - Ne Yo
So Sick - Ne Yo
lunes, 19 de noviembre de 2012
Bordas de hielo
Vengo a verte pasar todos los días,
vaporcito encantado siempre lejos...
Tus ojos son dos rubios capitanes;
tu labio es un brevísimo pañuelo
rojo que ondea en un adiós de sangre!
Vengo a verte pasar; hasta que un día,
embriagada de tiempo y de crueldad,
vaporcito encantado siempre lejos,
la estrella de la tarde partirá!
Las jarcias; vientos que traicionan; vientos
de mujer que pasó!
Tus fríos capitanes darán orden;
y quien habrá partido seré yo...!
vaporcito encantado siempre lejos...
Tus ojos son dos rubios capitanes;
tu labio es un brevísimo pañuelo
rojo que ondea en un adiós de sangre!
Vengo a verte pasar; hasta que un día,
embriagada de tiempo y de crueldad,
vaporcito encantado siempre lejos,
la estrella de la tarde partirá!
Las jarcias; vientos que traicionan; vientos
de mujer que pasó!
Tus fríos capitanes darán orden;
y quien habrá partido seré yo...!
Ya no estás
Ya no estas aquí, por que busco tu aliento y no lo encuentro... y lloro en silencio, ya no estas aquí, junto a mi... y aquella mirada que me decía cuanto me querías y que aun en la eternidad lo seguirás haciendo, porque? te fuiste
si todo era mas fácil contigo cuidándome... y aquellos consejos que me enseñaron a ver la vida mas sencilla o mas real, pienso que no estas ..pero sigues aquí...conmigo... en mi.
si todo era mas fácil contigo cuidándome... y aquellos consejos que me enseñaron a ver la vida mas sencilla o mas real, pienso que no estas ..pero sigues aquí...conmigo... en mi.
tal vez quiero gritar y correr y....... encontrarte, decirte cuanto te amo que todo lo que me diste fue mas allá, pero no puedo tu ya no estas en mi mente el recuerdo seguirá y jamas te borrara de mi, quisiera saber si perdonaste cada uno de mis errores, por que solo el amor incondicional lo perdona todo........y no es tarde para decir te ame mucho, gracias por todo.
sábado, 17 de noviembre de 2012
Con Los Años Que Me Quedan
"...con los años que me quedan..demostrare cuanto te quiero..."
con los que puedan quedarme, cuando este desfalleciendo, cuando estos dias de dolor sigan, aun asi sea poco el tiempo los que ahora siento, demostrare cuanto te quiero .... Quizá es in madurez de mi parte, orgullo....
"con los años que me quedan, yo vivire por darte amor, borrando cada dolor", "te hare olvidar cualquier error, no quise herirte mi amor, sabes que eres mi adoración, tu seras mi vida entera"
"se que aun me queda una oportunidad, se que aun no es tarde para recapacitar, se que nuestro amor es verdadero,...con los años que me quedan por vivir demostrare cuanto te quiero..."
--La silla vacía--
jueves, 15 de noviembre de 2012
Fragmento de "Mi dulce Audrina"
"...no juzges a las mujeres por lo que veas en pinturas y estatuas, juzgalas solo por lo que sepas tu misma acerca de las mujeres en tu vida...el dia en que cualquier hombre comprenda a cualquier mujer sera el dia en en que el mundo llegue a su fin. Los hombres son criaturas repugnantes y contradictorias, que dicen creer diosas para ponerlas en pedestal y una vez la tienen alli, les quitan su halo, le desgarran los vestidos, les arrebatan las alas para que no puedan volar y derriban el pedestal para que la mujer caiga a sus pies y el pueda gritarle y darle de patadas, llamandola fulana o algo peor..." (Mi dulce Audrina, V. C. Andrews, I capitulo)
martes, 13 de noviembre de 2012
Adiós
En costa lejana
y en mar de Pasión,
dijimos adioses
sin decir adiós.
Y no fue verdad
la alucinación.
Ni tú la creíste
ni la creo yo,
«y es cierto y no es cierto»
como en la canción.
Que yendo hacia el Sur
diciendo iba yo:
«Vamos hacia el mar
que devora al Sol».
Y yendo hacia el Norte
decía tu voz:
«Vamos a ver juntos
donde se hace el Sol».
Ni por juego digas
o exageración
que nos separaron
tierra y mar, que son
ella, sueño y el
alucinación.
No te digas solo
ni pida tu voz
albergue para uno
al albergador.
Echarás la sombra
que siempre se echó,
morderás la duna
con paso de dos...
Para que ninguno,
ni hombre ni dios,
nos llame partidos
como luna y sol;
para que ni roca
ni viento errador,
ni río con vado
ni árbol sombreador,
aprendan y digan
mentira o error
del Sur y del Norte,
del uno y del dos!
Gabriela Mistral
y en mar de Pasión,
dijimos adioses
sin decir adiós.
Y no fue verdad
la alucinación.
Ni tú la creíste
ni la creo yo,
«y es cierto y no es cierto»
como en la canción.
Que yendo hacia el Sur
diciendo iba yo:
«Vamos hacia el mar
que devora al Sol».
Y yendo hacia el Norte
decía tu voz:
«Vamos a ver juntos
donde se hace el Sol».
Ni por juego digas
o exageración
que nos separaron
tierra y mar, que son
ella, sueño y el
alucinación.
No te digas solo
ni pida tu voz
albergue para uno
al albergador.
Echarás la sombra
que siempre se echó,
morderás la duna
con paso de dos...
Para que ninguno,
ni hombre ni dios,
nos llame partidos
como luna y sol;
para que ni roca
ni viento errador,
ni río con vado
ni árbol sombreador,
aprendan y digan
mentira o error
del Sur y del Norte,
del uno y del dos!
Gabriela Mistral
domingo, 11 de noviembre de 2012
Diccionario del Diablo
A
Abandonado, s. y adj. El que no tiene favores que otorgar. Desprovisto de fortuna. Amigo de la verdad y el sentido común.
Absurdo, s. Declaración de fe en manifiesta contradicción con nuestra opiniones. Adj. Cada uno de los reproches que se hacen a este excelente diccionario.
Aburrido, adj. Dícese del que habla cuando uno quiere que escuche.
Academia, s. Escuela antigua donde se enseñaba moral y filosofía. Escuela moderna donde se enseña el fútbol.
Accidente, s. Acontecimiento inevitable debido a la acción de leyes naturales inmutables.
Acéfalo, adj. Lo que se encuentra en la sorprendente condición de aquel cruzado que, distraído, tironeó de un mechón de sus cabellos, varias horas después de que una cimitarra sarracena, sin que él lo advirtiera, le rebanara el cuello, según cuenta Joinville.
Acorde, s. Armonía.
Acordeón, s. Instrumento en armonía con los sentimientos de un asesino.
Acreedor, s. Miembro de una tribu de salvajes que viven más allá del estrecho de las Finanzas; son muy temidos por sus devastadoras incursiones.
Acusar, v.t. Afirmar la culpa o indignidad de otro; generalmente, para justificarnos por haberle causado algún daño.
Adagio, s. Sabiduría deshuesada para dentaduras débiles.
Adherente, s. Secuaz que todavía no ha obtenido lo que espera.
Adivinación, s. Arte de desentrañar lo oculto. Hay tantas clases de adivinación como variedades fructíferas del pelma florido y del bobo precoz.
Administración, s. En política, ingeniosa abstracción destinada a recibir las bofetadas o puntapiés que merecen el primer ministro o el presidente. Hombre de paja a prueba de huevos podridos y rechiflas.
Admiración, s. Reconocimiento cortés de la semejanza entre otro y uno mismo.
Admitir, v. t. Confesar. Admitir los defectos ajenos es el deber más alto que nos impone el amor de la verdad.
Antiamericano, adj. Perverso, intolerable, pagano.
Antipatía, s. Sentimiento que nos inspira el amigo de un amigo.
Año, s. Período de trescientos sesenta y cinco desengaños.
Apelar, v. i. En lenguaje forense, volver a poner los dados en el cubilete para un nuevo tiro.
Apetito, s. Instinto previsor implantado por la Providencia como solución al problema laboral.
Aplauso, s. El eco de una tontería. Monedas con que el populacho recompensa a quienes lo hacen reír y lo devoran.
Averno, s. Lago por el cual los antiguos entraban en las regiones infernales. El erudito Marcus Ansello Scrutator sostiene que de ahí deriva el rito cristiano del bautismo por inmersión. Lactancio, sin embargo, ha demostrado que esto es un error.
Avestruz, s. Ave de gran tamaño, a quien la naturaleza (sin duda en castigo de sus pecados) negó ese dedo posterior en el que tantos naturalistas piadosos han visto una prueba manifiesta de un planeamiento divino. La ausencia de alas que funcionen no es un defecto, porque, como se ha señalado ingeniosamente, el avestruz no vuela.
Ayer, s. Infancia de la juventud, juventud de la madurez, el pasado entero de la ancianidad.
B
Baal, s. Antigua deidad muy venerada bajo distintos nombres. Como Baal era popular entre los fenicios; como Belus o Bel tuvo el honor de ser servido por el sacerdote Berosus, quien escribió la célebre crónica del Diluvio; como Babel, contó con una torre parcialmente erigida a su gloria, en la Llanura de Shinar. De Babel deriva la expresión "blablá". Cualquiera sea el nombre con que se lo adora, Baal es el dios Sol. Como Belzebú, es el dios de las moscas, que son engendradas por los rayos solares en el agua estancada.
Baco, s. Cómoda deidad inventada por los antiguos como excusa para emborracharse.
Bailar, v. i. Saltar a compás de una música alegre, preferiblemente abrazando a la esposa o la hija del vecino. Hay muchas clases de bailes, pero todos los que requieren la participación de ambos sexos tienen dos cosas en común: son notoriamente inocentes y gustan mucho a los libertinos.
Baño, s. Especie de ceremonia mística que ha sustituido al culto religioso. Se ignora su eficacia espiritual.
Barba, s. El pelo que suelen cortarse los que justificadamente abominan de la absurda costumbre china de afeitarse la cabeza.
Barómetro, s. Ingenioso instrumento que nos indica qué clase de tiempo tenemos.
Belleza, s. Don femenino que seduce a un amante y aterra a un marido.
Benefactor, s. Dícese del que compra grandes cantidades de ingratitud, sin modificar la cotización de este artículo, que sigue al alcance de todos.
Beso, s. Palabra inventada por los poetas para que rime con "embeleso".Se supone que designa, de un modo general, una especie de rito o ceremonia que expresa un buen entendimiento, pero este lexicógrafo desconoce la forma en que se realiza.
Bufón, s. Antiguamente, funcionario adscripto a la corte de un rey, cuya función consistía en divertir a los cortesanos mediante actos y palabras ridículas, cuyo absurdo era atestiguado por sus abigarradas vestiduras. Como el rey, en cambio, vestía con dignidad, el mundo tardó varios siglos en descubrir que su conducta y sus decretos eran lo bastante ridículos como para divertir no sólo a su corte sino a todo el mundo. Al bufón se le llamaba comúnmente "tonto" ("fool"), pero los poetas y los novelistas se han complacido siempre en representarlo como una persona singularmente sabia e ingeniosa. En el circo actual, la melancólica sombra del bufón de la corte deprime a los auditorios más modestos con los mismos chistes con que en su época de esplendor ensombrecía los marmóreos salones, ofendía el sentido del humor de los patricios y perforaba el tanque de las lágrimas reales.
C
Caaba, s. Piedra de gran tamaño ofrecida por el arcángel Gabriel al patriarca Abraham, que se conserva en La Meca. Es posible que el patriarca le haya pedido al arcángel un pedazo de pan.
Cabezas Redondas, s. Miembros del partido parlamentario en la guerra civil inglesa, llamados así por su costumbre de usar el cabello corto, mientras que sus enemigos, los Caballeros, los llevaban largos. Había otras diferencias entre ellos, pero la moda en el peinado constituía la causa fundamental de sus reyertas. Los Caballeros eran realistas porque su rey, un individuo indolente, prefería dejarse crecer el pelo antes que lavarse el cuello. Los Cabezas Redondas, en su mayoría barberos y fabricantes de jabón, consideraban eso como un insulto a su profesión; es natural que el cuello del monarca fuese el objeto de su particular indignación. Hoy, los descendientes de los beligerantes se peinan todos igual, pero las brasas del odio encendido en aquel antiguo conflicto siguen ardiendo bajo las cenizas de la cortesía británica.
Cabo, s. Hombre que ocupa el último peldaño de la escalera militar; cuando un cabo cae en combate, el golpe es menor.
Caníbal, s. Gastrónomo de la vieja escuela, que conserva los gustos simples y la dieta natural de la época preporcina.
Cáñamo, s. Planta con cuya corteza fibrosa se hacen collares, que suelen usarse al aire libre en una ceremonia precedida de oratoria; el que se pone uno de esos collares, deja de tener frío.
Cañón, s. Instrumento usado en la rectificación de las fronteras.
Capacidad, s. Conjunto de dotes naturales que permiten realizar una pequeña parte de las ambiciones más mezquinas que distinguen a los hombres capaces de los muertos. En último análisis, la capacidad consiste, por lo general, en un alto grado de solemnidad. Es posible, sin embargo, que esta notable cualidad sea apreciada a justo título; ser solemne, no es tarea fácil.
Capital, s. Sede del desgobierno. Lo que provee el fuego, la olla, la cena, la mesa, el cuchillo y el tenedor al anarquista, quien sólo contribuye con la desgracia antes de la comida.
Carcaj, s. Vaina portátil en que el antiguo estadista y el abnegado aborigen transportaban su argumento más liviano.
Carnada, s. Preparado que hace más apetitoso el anzuelo. La belleza es la mejor de las carnadas.
Carne, s. Segunda Persona de la Trinidad secular.
Centauro, s. Miembro de una raza de personas que existió antes que la división del trabajo alcanzara su grado actual de diferenciación, y que obedecían la primitiva máxima económica. "A cada hombre su propio caballo". El mejor fue Quirón, que unía la sabiduría y las virtudes del caballo a la rapidez del hombre.
Cerbero, s. El perro guardián del Hades, que custodiaba su entrada, no se sabe contra quién, puesto que todo el mundo, tarde o temprano, debía franquearla, y nadie deseaba forzarla. Es sabido que Cerbero tuvo tres cabezas, pero algunos poetas le atribuyeron hasta un centenar. El profesor Graybill, cuyo erudito y profundo conocimiento del griego da a su opinión un peso enorme, ha promediado todas esas cifras, llegando a la conclusión de que Cerbero tuvo veintisiete cabezas; juicio que sería decisivo si el profesor Graybill hubiera sabido: a) algo de perros y b) algo de aritmética.
Cerebro, s. Aparato con que pensamos que pensamos. Lo que distingue al hombre contento, con "ser" algo del que quiere "hacer" algo. Un hombre de mucho dinero, o de posición prominente, tiene por 32 lo común tanto cerebro en la cabeza que sus vecinos no pueden conservar el sombrero puesto. En nuestra civilización y bajo nuestra forma republicana de gobierno, el cerebro es tan apreciado que se recompensa a quien lo posee eximiéndolo de las preocupaciones del poder.
Aún...
Quiero hablar contigo
(Carlos Puebla)
Quiero hablar contigo antes que te vayas
quiero preguntarte por aquellas cosas
que hubo entre tú y yo
dime si la luna dejó de ser luna
si acaso está muerto o es que ya no alumbra
como ayer el sol.
Yo sé que lo nuestro no ha de volver nunca
que sólo el recuerdo de cosas pasadas
queda entre los dos
y a pesar de todo quiero hablar contigo
para que me digas si sientes la misma
soledad que yo.
(Carlos Puebla)
Quiero hablar contigo antes que te vayas
quiero preguntarte por aquellas cosas
que hubo entre tú y yo
dime si la luna dejó de ser luna
si acaso está muerto o es que ya no alumbra
como ayer el sol.
Yo sé que lo nuestro no ha de volver nunca
que sólo el recuerdo de cosas pasadas
queda entre los dos
y a pesar de todo quiero hablar contigo
para que me digas si sientes la misma
soledad que yo.
sábado, 10 de noviembre de 2012
viernes, 9 de noviembre de 2012
domingo, 4 de noviembre de 2012
viernes, 2 de noviembre de 2012
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